El silencio proyectado hacia lo más recóndito de nuestro ser, se torna en luz.
Así como el sol separa el día de la noche, asimismo el silencio es la luz que ilumina la oscuridad de nuestros problemas e inquietudes.
Y recuerda, si deseas saber más, te sugiero leer mis libros, donde encontrarás más reflexiones para elevar tu aprendizaje espiritual.