Es curioso ver como en un momento se destruye todo lo que se alcanza con esfuerzo o con el paso del tiempo.
Un desequilibrio hormonal nos puede hacer malas jugadas. Ya sea por estar demasiado tristes o deprimidos, así como demasiado alegres o eufóricos.
Esto puede hacer que tomemos decisiones que no nos convienen en lo absoluto y de la misma manera actuar de acuerdo a nuestras emociones.
Y recuerda, si deseas saber más, te sugiero leer mis libros, donde encontrarás más reflexiones para elevar tu aprendizaje espiritual.